Semana del 03 de Enero al 09 de Enero de 2025

¿Cómo despedir el 2024? Un mensaje de esperanza y fe

¿Cómo despedir el 2024? Un mensaje de esperanza y fe

Rodolfo del Ángel del Ángel

Es momento de reflexionar sobre lo que nos espera en el 2025 y cómo debemos despedir el 2024. En un mundo que ha estado marcado por conflictos y desafíos, tanto a nivel global como local, es fácil caer en el desaliento. Sin embargo, el mayor capital con el que contamos en la vida es nuestra fe en Dios.

LA FE: NUESTRA BRÚJULA
Aunque el 2024 ha sido un año complejo, es crucial mantener la esperanza. La fe debe ser nuestra brújula, esa fuerza interna que nos orienta en la dirección correcta, ayudándonos a avanzar hacia lo que nos brinda bienestar y paz en nuestros corazones. En tiempos de tribulaciones, es importante no perder de vista que, a pesar de las dificultades, Dios tiene el control de nuestras vidas. Las circunstancias externas pueden ser inciertas, pero la fe en Dios nos da la seguridad de que Él está al mando, guiando nuestros pasos cada día.

MANTENER LA ESPERANZA
La esperanza no es solo esperar que algo bueno suceda, sino trabajar activamente para construirla. Esto se logra mediante la buena comunicación, fortaleciendo las relaciones familiares y comunitarias, y estando dispuestos a comprometernos para transformar positivamente nuestro entorno. Así, en lugar de centrarnos en lo negativo, podemos construir un futuro más esperanzador, tanto para nosotros como para los demás. Cada año, y cada día, es una oportunidad para reavivar la fe y construir una sociedad más justa y amorosa.

ABANDONAR EL MATERIALISMO Y VIVIR EL AQUÍ Y AHORA
A menudo estamos demasiado enfocados en lo material. En una sociedad que valora el tener, hemos olvidado la importancia de lo esencial: el tiempo de calidad con nuestros seres queridos, las conversaciones profundas, el contacto cara a cara, y sobre todo, vivir el momento presente. Vivimos en un mundo lleno de distracciones, desde las redes sociales hasta las presiones externas, y a menudo nos olvidamos de saborear lo simple y lo verdadero de la vida. La vida no está en las pantallas ni en la acumulación de bienes materiales, sino en los momentos compartidos, en los pequeños detalles, en el presente.

UN LLAMADO A VIVIR CON GRATITUD Y CONFIANZA
El 2025 se presenta como una nueva oportunidad para seguir creciendo, para fortalecer lo que ya hemos logrado y para avanzar con fe y esperanza. Pero, para ello, es fundamental vivir el aquí y ahora, con un corazón lleno de gratitud. Cada día que tenemos es un regalo divino, una oportunidad de aprender, de amar y de crecer. Debemos ser conscientes de las bendiciones que ya tenemos y no esperar a perderlas para valorarlas.

Mantengamos viva nuestra fe, a abrazar el futuro con esperanza, a disfrutar de lo que tenemos en el presente y a vivir con un corazón agradecido. La vida, nos recuerda, es un don de Dios, y debemos aprovecharla con conciencia y amor. Que este nuevo año sea una oportunidad para renovar nuestra fe, nuestra esperanza y nuestro compromiso de ser mejores seres humanos.

¡Feliz Año Nuevo! Que 2025 nos encuentre renovados y dispuestos a caminar con fe y esperanza.