Semana del 04 de Mayo al 10 de Mayo de 2017

La verdadera lucha de las madres solteras

La verdadera lucha de las madres solteras

Fernando Garduza

A unos días de que se festeje el Día de las Madres, EMSAValles ha querido retratar una imagen real de las mujeres “luchonas”, una imagen que supera por mucho los “memes” y burlas que hacen las redes sociales de quienes por cualquier circunstancia han tenido que sacar adelante a sus hijos sin la necesidad de un “hombre”. Una mujer “luchona” no es aquella que se va de fiesta sin importar dónde se quedan sus hijos, sino la que, con todo y las limitantes, prejuicios y estigmas, logra sacarlos adelante sin necesidad del apoyo masculino que acaba quedando a salvo del escrutinio de una sociedad caracterizada por su arraigado machismo.

Dora Rocío es una reportera que ha trabajado en medios de comunicación y partidos políticos, tiene una hija de seis años, es madre soltera, y gracias al apoyo de sus papás ha logrado sacarla adelante con todo y las adversidades que conlleva vivir en una sociedad con un machismo arraigado que no permite que las mujeres sobresalgan, y todavía ve mal que sean independiente o que, por cualquier circunstancia, ya sea decisión propia o no, crían solas a un hijo.
En entrevista, platicó sobre las dificultades que ha tenido en el ámbito laboral, las cuales van desde la falta de un salario digno, la desigualdad salarial entre hombres y mujeres, en algunos casos la inflexibilidad de horarios y de sus jefes, y en casos más graves, acoso.
Cuando trabajó en un partido político, platica que su niña estaba recién nacida, y tenía un compañero que ganaba casi el doble pese a que estaban en la misma área de comunicación, y ella hacía más trabajo que él. Ha visto la misma situación en los medios.
“Otra de las desventajas es el tiempo, siempre he buscado trabajos que me dejen tiempo para convivir con mi niña, tiempo para estar con ella en las tardes, para poderla educar. Yo siempre he sido mucho de hacer cosas con ella como salir a pasear, llevarla al cine, trato de apapacharla, meterla a clases, entonces busco trabajos donde se me permita ese espacio con ella, pero no siempre existen las posibilidades”.

EL PERIODISMO NO ES OPCIÓN
“En el periodismo no hay un horario fijo, a veces te llaman y tú ya tenías algún compromiso, en uno de los medios que trabajé mandaba mis notas y me decían que tenían que estar disponible siempre que se me llamara porque así lo requería el medio, pero yo tengo a mi niña y a veces no me la pueden cuidar en la tarde, si bien me apoyan, a veces no se puede, a veces no entienden eso los jefes, quieren imponerte el horario, aunque sepan que tú tienes una responsabilidad”.
Lo mismo ocurrió en el siguiente medio que trabajo: “yo ya estaba saliendo muy tarde y tenía muy poco tiempo para la niña, de un día a otro me dijeron que me iban a cambiar el horario de 2 de la tarde a 10 de la noche, porque requerían que estuviera ahí, me iban a poner más notas, más trabajo, y haría más cosas, pero no me iban a pagar más, no había una justificación siento que me querían fastidiar”. Tras esa experiencia renunció.
En este caso, su jefe comparó su situación con la de una compañera, sin embargo, sus circunstancias eran distintas: “me dijo que si una de mis compañeras podía resolver lo del cuidado de sus hijos, yo por qué no, pero somos muy aparte, ella vive con sus papás y tiene el apoyo del papá de sus hijos, y me insistió en que si ella podía, yo por qué no”.
Otra desventaja para una madre soltera de trabajar en un medio de comunicación, es que muchos no tienen seguridad social y los salarios de los reporteros no son buenos.
“Los medios no son un buen lugar para trabajar para una madre soltera, en mi caso tengo apoyo de mis papás, mi niña está en primero de primaria, y no batallo para llevarla o recogerla, pero he visto a algunas de mis compañeras que están en una rueda de prensa y se tienen que salir corriendo porque el niño va a salir temprano, a mí se me ha facilitado eso porque está en la escuela donde mi mamá trabaja, pero he visto casos de compañeros que tienen que arreglárselas”.
Además de esto, ante la falta de prestaciones, no se genera un proyecto de vida, para comprar una casa, un seguro médico, juntar una pensión, sino que los medios son muy inestables “y te deja con la duda de qué vas a hacer en un futuro cuando seas grande o qué va a hacer mi niña, no quiero que sea una carga”.

EL MIEDO ES MÁS FUERTE
Otra situación que ha generado problemas es el acoso. Platica Dora que en uno de sus trabajos su jefe la acosaba, sin embargo, lee daba miedo levantar la voz, sentía impotencia porque sentía el morbo.
“Da miedo denunciar, lo del acoso yo sabía que estaba penado, pero no lo denuncié por miedo porque me iban a correr del trabajo y yo lo necesitaba, entonces me callaba. En otro trabajo yo estaba a nada de denunciar, ya había gente apoyándome y asesorándome, pero alguien me dio un consejo y me detuve, al final de cuentas yo iba a salir perdiendo”.

LOS PREJUICIOS Y LAS BURLAS
Lo curioso es que, ante estas situaciones, muchas veces son las propias mujeres que generan los prejuicios: “los primeros prejuicios de los que me di cuenta es que muchos hombres se te acercan creyendo que eres ‘presa fácil’, porque si ya estuviste con alguien y ahora estás sola, vas a estar disponible, y lo peor es que muchas veces las mismas mujeres crean ese concepto”.
Dicha circunstancia ocurrió cuando trabajó en un partido político, pues la gente pensaba que por ser madre soltera y ante la necesidad de apoyo y dinero, “con cualquiera me iba a andar acostando, pero no, yo tengo otra visión de las cosas, pero lo más raro es que las mujeres también creían eso”.
Otra circunstancia en la cual las mujeres tienen una parte de la responsabilidad, es en los juicios y estigmas con los que cargan las madres solteras, tal es el caso de las “luchonas”, pues en ocasiones lo reproducen y forman parte de la crítica.

“LAS LUCHONAS”: SÍMBOLO DE DESIGUALDAD
Para Dora es ofensivo que en las redes sociales la gente se burle de las madres solteras con la etiqueta de “luchonas”, pues se hacen juicios a la ligera en contra de las mujeres, pero no en contra de los padres.
“No se juzga al papá, porqué se critica a una mamá que no se sabe lo que ha vivido, tienes que ir desde consultas sola, hacer los preparativos sola para la llegada de un bebé, y empezar a planificar qué le vas a decir cuando te pregunte por su papá, son esas cosas qué dices, por qué se juzga a la mamá y no al papá”.
Además, aunque reconoce que sí existen madres solteras que pese a dicha condición siguen acudiendo a fiestas o haciendo su vida normal, se queja puesto que los hombres, con todo y la responsabilidad que conlleva tener un hijo, se desentienden y no son criticados de la misma manera.
“Es un estigma hacia un sector de la población que es muy amplio y que en realidad no sabes lo que ha hecho, no sabes lo que ha pasado, hay cosas que se tienen que enfrentar con dolor. Mucha gente no sabe lo que pasamos, lo que vivimos, y todavía se atreven a burlarse”.
Por último, ejemplifica con su caso. El papá de su niña tiene cuatro hijos de diferentes madres, pero sigue haciendo su vida normal, sigue yendo a fiestas como si no existiera en su vida responsabilidad mayor. A pesar de todo, “yo no he visto algún ‘meme’ de un papá porque abandona a su hijo”.
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