Semana del 12 de Julio al 18 de Julio de 2024

Temporada de huracanes: Preparativos y prevención en San Luis Potosí

Temporada de huracanes: Preparativos y prevención en San Luis Potosí

Es de suma importancia de la coordinación y la proactividad en la gestión de riesgos.

Mauricio Ordaz, Director de Protección Civil del estado de San Luis Potosí, expresó su preocupación por la temporada que se avecina y compartió las expectativas y preparativos ante la presente temporada de huracanes que, aunque ya ha tenido eventos significativos, aún no concluye. Ordaz enfatizó la importancia de estar alerta y tomar medidas preventivas, ya que la actividad ciclónica continúa siendo una amenaza latente.

Ordaz explicó que la temporada de ciclones y tormentas tropicales, que se extiende de mayo a noviembre, implica una vigilancia constante y una serie de acciones preventivas por parte de las autoridades locales y estatales. A pesar de los fenómenos ya ocurridos, como el huracán Beryl, la atención se centra ahora en los meses restantes, que tradicionalmente también pueden ser muy activos en términos meteorológicos.

"Estamos en alerta permanente, especialmente en los municipios más vulnerables. Los fenómenos meteorológicos pueden cambiar de trayectoria y fuerza de manera drástica, como ya hemos visto anteriormente. Es crucial que mantengamos una vigilancia constante y estemos preparados para cualquier eventualidad", comentó Ordaz.

Uno de los aspectos críticos señalados por Ordaz fue la preparación de los ayuntamientos locales. Según el director, aunque el consejo estatal de protección civil se mantiene en sesión permanente y ha emitido exhortos para la activación de las unidades municipales, aún hay deficiencias en la respuesta local. "Los ayuntamientos deben actuar de manera preventiva. Ellos son los primeros respondientes y deben garantizar la limpieza de colectores pluviales, campañas de concientización para evitar tirar basura en vías públicas y cuerpos de agua, y la regulación de comercios que todavía tienen malas prácticas de desecho", enfatizó.

En cuanto a los parajes turísticos de la Huasteca, muchos de ellos permanecen cerrados de manera preventiva. Ordaz mencionó algunos de los lugares que están temporalmente clausurados, como las cascadas de Tamul, el embarcadero La Morena y el puente de Dios. Estos cierres buscan evitar accidentes y garantizar la seguridad de los visitantes ante posibles crecidas de ríos y otros peligros asociados a las lluvias intensas.

La respuesta estatal también incluye una estrecha colaboración con las fuerzas federales. El plan DN-III de la Sedena y la Guardia Nacional son fundamentales en estas acciones preventivas y de respuesta ante emergencias. "El gobernador está muy comprometido con la seguridad de la población. Hemos destinado efectivos, vehículos y recursos materiales para estar preparados. Tenemos helicópteros y unidades todo terreno listos para cualquier eventualidad", afirmó Ordaz.

Un tema recurrente es la necesidad de mantener a la población informada y consciente de los riesgos. Las redes sociales, aunque útiles, también pueden convertirse en plataformas de desinformación y quejas infundadas. Ordaz resaltó que la comunicación oficial y la colaboración de la ciudadanía son esenciales para una gestión efectiva de los riesgos. "La gente necesita entender que los fenómenos meteorológicos pueden cambiar rápidamente y que las medidas preventivas son cruciales para minimizar daños y evitar tragedias", puntualizó.

Además de la vigilancia y la respuesta inmediata, la administración estatal está enfocada en la prevención a largo plazo. Las lluvias recientes han contribuido significativamente a la recuperación de los niveles de agua en las presas y ríos, lo cual es beneficioso después de un período prolongado de sequía. Sin embargo, esto también representa un riesgo potencial si se suman más lluvias intensas. "Las presas han aumentado su capacidad significativamente. Esto es positivo, pero también requiere una vigilancia constante para evitar desbordamientos y garantizar la seguridad de las comunidades cercanas", explicó Ordaz.

La colaboración entre las autoridades estatales, municipales y federales, junto con la participación activa y consciente de la ciudadanía, son clave para enfrentar estos fenómenos de manera efectiva. La preparación y la prevención no solo salvan vidas, sino que también minimizan los daños materiales y económicos, asegurando una recuperación más rápida y eficiente después de cada evento meteorológico.

A medida que avanzamos en la temporada de huracanes, es fundamental que todos los actores involucrados, desde las autoridades hasta la población general, trabajen juntos para enfrentar estos desafíos con determinación y responsabilidad.

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