Semana del 21 de Agosto al 27 de Agosto de 2020

En "Gorditas Doña Vero" Mujeres trabajadoras no se rinden ante el Covid-19

En "Gorditas Doña Vero" Mujeres trabajadoras no se rinden ante el Covid-19

Verónica Galván

Muchas son madres solteras que se ganan la vida diariamente vendiendo alimentos

Vendiendo gorditas, que desde muy temprana hora elaboran, un grupo de mujeres, entre las que se encuentran madres solteras y amas de casa, se ganan la vida para llevar el sustento a sus hogares.

Verónica Maldonado Salazar, propietaria del comercio dedicado a esta actividad, dijo que desde hace nueve años formalizó su establecimiento, pero que desde muy pequeña descubrió su gusto por la cocina, tenía 6 o 7 años cuando se subía a una silla a lavar trastes, a voltear las gorditas en el comal o a menearle a la comida que su abuela elaboraba, lo cual hacían también para vender gorditas en un negocio familiar.

DOÑA VERO
Su negocio se llama "Gorditas Doña Vero", y aparte de las gorditas, dijo que sabe hacer varias comidas, como mole, menudo y otras.

"A mi abuelita le gustaban cocinar, entonces yo le ayudaba, ella vendía comidas en la zona centro, en el mercado, por donde estaba antes el viejo Vencedor, ella se llamaba Soledad Arvizu", comenta.

Platica que su abuelita toda su vida se dedicó a vender gorditas, desde los años 60’s o 70’s, por lo que este es un negocio familiar de hace muchos años.

Sobre los guisos, dijo son parte de la sazón de su abuela, quien le enseñó a cocinar, "es algo similar, aunque no podemos decir que somos igual o cocinamos idéntico".

Expresa que su madre también se dedica a vender comidas en otro comercio, elabora gorditas, migadas, enchiladas, menudo y otras comidas, ella se ubica sobre la avenida Pedro Antonio Santos.

En el comercio de la señora Vero, venden gorditas de chicharrón, huevo rojo, huevo verde, picadillo, papa, frijoles con queso y carne deshebrada.

GENERACIÓN DE EMPLEOS
Menciona que genera más de 12 empleos, añadiendo que todas las trabajadoras son madres de familia, algunas solteras y otras con esposo, pero todas muy dedicadas, quienes llegan desde antes de las 6 de la mañana para comenzar a hacer los guisos y preparar todo para hacer canastos de gorditas por pedidos, y para algunos puestos donde las venden.

"Esta es una fuente de ingresos y a pesar de que la pandemia ha golpeado a muchos comercios, nosotras hemos podido sobrevivir para poder seguir manteniendo estas fuentes de empleo, aunque la venta ha disminuido mucho, estamos contentas porque tenemos trabajo", admite.

Dijo que tienen puestos en las calles Abasolo y Porfirio Díaz con venta de gorditas de canasta, de las que ellas preparan, en un pequeño local en la zona de mercados, donde tienen dos meses de haber llegado, porque antes se ubicaba en otro espacio donde duraron nueve años.

El nuevo local está ubicado frente al bar Aguaje, en la calle Francisco I. Madero de la zona Centro, altos, número 1, arriba de la Platanera López.

Destaca que calculan cuántas gorditas se venden al día y las que quedan, cuando no hay muchas ventas, las reparten entre las trabajadoras para que lleven de comer a sus familias.

"En estos tiempos de pandemia, tener trabajo es una bendición, por eso seguimos adelante y estamos agradecidas con quienes tienen la confianza de consumir los alimentos que preparamos", finaliza.

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