Semana del 10 de Julio al 16 de Julio de 2015

Potosinas al poder (2ª y última parte)

Potosinas al poder (2ª y última parte)

Franco Alejandro Coronado

Son pocas mujeres que obtuvieron un cargo de representación popular en la pasada elección, el número se reduce si hablamos de aquéllas que ejercerán verdaderamente un liderazgo. De entrada, como lo señalé en este espacio, ningún municipio importante del Estado será gobernado por una mujer, lo que significa que no habrá una alcaldesa con los suficientes reflectores durante estos tres años.

Por lo tanto, la atención se centra en las legisladoras federales y locales. En cuanto a las potosinas que van a San Lázaro, debemos seguirle la pista a Erika Briones, electa por el Distrito II Federal con cabecera en Soledad. Tiene un amplio margen para seguir creciendo políticamente. Primero, porque a su partido le fue muy bien en la pasada elección, gobernarán al 40% de la población en el Estado. Segundo, por su cercanía con el jefe de facto del perredismo potosino y alcalde de la capital, Ricardo Gallardo.

Caso distinto para la diputada federal electa por el PAN, Ángeles Rodríguez, su partido está en proceso de reacomodo después de la sacudida del 7 junio y su grupo político no es afín a la actual dirigencia estatal. Por su parte, Ruth Tiscareño seguirá fortaleciéndose en la zona altiplano, buscando la reelección. Su influencia será sólo regional.

En el legislativo local habrá que seguir de cerca a la panista Josefina Salazar, quien llega a la curul por el principio de representación proporcional. Su experiencia como Oficial Mayor del Congreso, posición desde la cual lidió y concilió con los grupos parlamentarios, le ha dado las tablas necesarias para la interlocución entre las fuerzas políticas. En su partido son escasos los espacios ocupados por mujeres, lo cual debe aprovechar para consolidarse dentro del sector femenino del blanquiazul.

Por el lado del PRI y sus partidos satélite, PVEM y Nueva Alianza, atendiendo a su experiencia política y cargos públicos, las diputadas electas que representarán un liderazgo son: Martha Orta Rodríguez (Secretaria General de la CNOP), Rebeca Terán (diputada federal con licencia) y Esther Angélica Martínez (diputada federal con licencia). Sin embargo, su papel protagónico será, también, en los ámbitos regionales y dentro de su partido.

El reto de la mujeres que ostentarán un cargo de representación popular a partir del 7 de junio es mayúsculo. En primer lugar deben aumentar su presencia e influencia, no solo al interior de sus respectivos partidos, por el contrario, deben buscar empatía con los ciudadanos y las causas sociales de los potosinos. Hay pocas mujeres en cargos públicos y por lo tanto, las que están deben capitalizar la palestra y los reflectores. De igual forma, su liderazgo debe trascender más allá del ámbito regional y sus distritos electorales.

En San Luis Potosí hay banderas que reclaman el empuje de nuestras servidoras públicas, como son: los derechos humanos, que implican posiciones firmes y contundentes, sí, riesgos para el cálculo político, también, pero precisamente, es lo que la población demanda. La protección y atención a víctimas, el desarrollo social, la inclusión y mejora de las condiciones de vida de nuestros pueblos indígenas son ejemplos de asignaturas pendientes en el Estado.

De igual forma, un asunto apremiante es la violencia hacia las mujeres en todas sus expresiones. En los municipios del altiplano y la huasteca deben impulsarse verdaderos centros de atención y prevención contra la violencia hacia las mujeres, esa es una tarea titánica que tendrán nuestras diputadas electas. Veremos como asumen la responsabilidad.