Los monstruos en la literatura y el cine son un atractivo para las personas

Los monstruos en la literatura y el cine son un atractivo para las personas

EMSAVALLES Noticias| San Luis Potosí, S.L.P| Lunes, 20 de Noviembre de 2017| 13:09

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Los vampiros, psicópatas y zombies son tres presencias muy arraigadas en la mentalidad de las personas, y son parte de la cultura popular, ya que representan muchos de los miedos y pesadillas que actualmente vivimos, señaló en entrevista el escritor Roberto Coria en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

Como parte de las actividades del Festival Internacional de la Letras en San Luis, en donde esta entidad de la UASLP tuvo participar al ser sede de la mesa redonda: "De vampiros, zombies y psicópatas en la literatura", en donde también participaron los escritores Alexandro Roque y Ronnie Medellín.

El autor, comentó que la gente se siente atraída por estos temas sanguinarios debido a la cercanía que que se tiene con esto, "por ejemplo, sí tu te paras frente a un puesto de periódicos, vas a ver una gran cantidad de cosas horribles que están sucediendo en la sociedad, siempre he pensado que los monstruos en la literatura son mucho más agradables que los de la realidad".

Agregó que los vampiros, zombies y psicópatas, quedan atrapados en la pantalla cuando se apaga el reproductor de video o en el libro al cerrarlo, en cambio sí se encuentra a un criminal en la calle las consecuencias pueden ser muy graves. Apuntó que, en la antigüedad al no entender algunos fenómenos naturales, las personas les daban una explicación sobrenatural.

Indicó que este tipo de literatura fantástica esta dirigida usualmente a los jóvenes, es una estupenda puerta de entrada a este mundo, ayuda a que se acerquen a los libros, ya que es un tema que les atrae y no es tediosos de abordar, "yo en lo personal me siento mucho más cómodo leyendo este tipo de relatos que otras formas literarias".

Por último, recomendó que la lectura se haga por convicción y no por imposición, ya que sí se realiza por obligación no se entienden las cosas, no se disfrutan y se tiene una mala experiencia, y como resultado se tiene una persona a la que no le gustan los libros.