El infierno de José, tras ser atacado por una jauría

El infierno de José, tras ser atacado por una jauría

Haber sobrevivido a la jauría de perros que lo atacó en San Mateo Otzacatipan, ha sido para José David Castillo un infierno tras la amputación de extremidades

REDACCIÓN  | lasillarota.com| Toluca| Lunes, 17 de Julio de 2017| 15:57

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Haber sobrevivido a la jauría de perros que lo atacó el domingo 18 de junio en San Mateo Otzacatipan, ha sido para José David Castillo García, de soportar cirugías, la amputación de una pierna y un brazo, y de estar ya 30 días sin poder hablar ni comer, postrado en una cama de hospital.

"Primero Dios, yo confío en que no se nos va a ir, que se pondrá bien y que va a salir adelante", pide entre sus ruegos Ana Emma García Ruíz, madre del joven de 18 años de edad y quien es el mayor de sus hijos.

José David lucha por su vida, postrado en una cama del hospital Adolfo López Mateos de Toluca, donde su madre lo encontró un día después del ataque.

 "La gravedad sigue, no ha bajado, le ha dado neumonía y le han detectado unas bacterias y casi siempre lo tienen sedado porque no soporta el dolor", relata Ana.

Entre la historia que hila Ana Emma, es que el domingo 18 de junio, justo el Día del Padre, su hijo acudió a una fiesta pero ya no regresó. Fue hasta el siguiente día que supo mediante las noticias que un joven había sido atacado por una jauría de perros en San Mateo Otzacatipan, y fue entonces que acudió al hospital donde lo encontró casi muerto.

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"Estaba todo mordido de la cara, de las manos, piernas, muy mal estaba mi hijo y no despertó hasta el tercer día y fue cuando nos pudo contar de poco en poco lo que le había ocurrido", recordó la madre.

Fue durante la noche del domingo 18 de junio cuando ocurrió el ataque, José David había acompañado a una amiga suya a su casa en San Pedro Totoltepec, pero en el camino, en el barrio del Bordo de las Canastas, los atacó la jauría de perros.

Ambos fueron auxiliados minutos más tarde y llevados a centros de salud para su atención, pues las mordeduras eran mortales.

Con información de El Sol de Toluca)