Un maestro que no solo enseña música; construye puentes entre el arte y la vida, guiando a sus alumnos hacia la autorreflexión y la superación personal a través de las melodÃas y los acordes.
La música, un arte que se entrelaza con la vida desde los primeros acordes, Chema Castillo, un docente de música cuya trayectoria se ha forjado en notas y experiencias memorables comparte su historia, que es como una sinfonÃa en constante evolución, y los compases futuros prometen aún más crescendos y armonÃas en el viaje musical y educativo que es su vida.
DESCUBRIENDO LA PASIÃN
Chema rememora sus primeros pasos en el universo musical, destacando su inscripción a clases de piano a la temprana edad de 7 años. "Fue como abrir una puerta a un mundo mágico", comparte. Su interés tomó forma durante la secundaria, consolidándose en concursos donde, a los 10 años, descubrió su voz. AsÃ, el camino hacia la música se esculpió lentamente.
EL CAMINO HACIA LA DOCENCIA
Con un gesto reflexivo, Chema explica cómo su viaje musical lo llevó a explorar diversos roles. "En la música puedes ser solista, instrumentista, arreglista, compositor o docente de música. Me di cuenta de mi habilidad para conectar con los niños y elegà el camino de la docencia", revela. Su empatÃa y capacidad para enseñar se volvieron fundamentales en la elección de su carrera.
ECOS DE INSTRUMENTOS
Cuando se trata de instrumentos, Chema destaca su afinidad por el bajo eléctrico, el piano y la guitarra. Su formación en educación artÃstica lo ha sumergido también en percusiones como la baterÃa, flauta, melódica y teorÃa musical. "Me encanta cantar, tocar el piano y la guitarra, pero es esencial tener conocimientos variados para guiar a los alumnos en este mundo de sonidos y melodÃas", enfatiza.
MELODÃAS DE INFLUENCIA
La balada romántica, tejida por las influencias musicales de su padre, marcó el alma musical de Chema. "José José, Luis Miguel, Ãngeles Negros... todos influyeron en mÃ". Sin embargo, al abordar la enseñanza, su enfoque cambia. "Pido a mis alumnos que toquen lo que aman. Aunque mi corazón late por la balada, me ajusto a los gustos de mis estudiantes para crear un entorno favorable".
ACORDE DE EXPERIENCIAS
Chema destaca varios momentos que han resonado a lo largo de su carrera. Desde sus victorias en concursos de canto en la secundaria hasta su participación en el coro de la facultad de música de Tampico, cada evento ha contribuido a su crecimiento. "Cantar en la catedral de Tampico, integrarme al coro de la escuela estatal de música en San Luis Potosà y organizar eventos navideños con mis alumnos son hitos inolvidables. Cada uno añade capas a mi vida", comparte con una sonrisa.
EVOLUCIÃN PEDAGÃGICA
En el segundo acto de nuestra conversación con Chema Castillo, exploramos la evolución de su enfoque pedagógico a lo largo de los años. Inicialmente arraigado en métodos tradicionales de partitura y solfeo, Chema ha aprendido a adaptarse a las necesidades y motivaciones de sus alumnos. Reconociendo que la rigidez puede ser una barrera, ahora integra teorÃa, técnica y repertorio personalizado para crear un ambiente educativo más enriquecedor y motivador.
DESAFÃOS Y GRATIFICACIONES
Enfrentar una variedad de habilidades y edades ha sido un desafÃo monumental. Desde trabajar con niños con autismo hasta adultos mayores, cada grupo demanda un enfoque único. "Cada persona es un mundo", reflexiona Chema, destacando la importancia de adaptarse a la forma de aprendizaje de cada alumno. Superar desafÃos, como la falta de acceso a instrumentos o el temor al error, se convierte en una misión para él, fomentando un espacio de aprendizaje libre de inhibiciones.
MÃTODOS PEDAGÃGICOS INNOVADORES
El método de Chema se basa en la experiencia, llevando a los alumnos al escenario desde el principio. "Si no tienes la experiencia de enfrentar una audiencia, no podrás superar las barreras de timidez y miedo", comparte. Su enfoque es dinámico, ajustándose a las necesidades de cada estudiante y permitiendo que la música se convierta en una herramienta de comunicación con la sociedad.
MOMENTOS DE SATISFACCIÃN
La mayor recompensa para Chema es presenciar el progreso de sus alumnos. Ver cómo superan desafÃos, interpretan canciones en eventos y se transforman en el escenario es el corazón de su labor. "Es muy satisfactorio", sonrÃe, aludiendo a la importancia de esos momentos efÃmeros que representan semanas de ensayo y dedicación.
CONSEJOS PARA ESTUDIANTES
A sus alumnos, Chema les ofrece un consejo valioso: nunca dejen de intentarlo. Tanto para aquellos que buscan disfrutar la música como hobby, como para aquellos que aspiran a dedicarse profesionalmente a ella, insiste en la importancia de perseverar, disfrutar y aprender de los desafÃos, equiparando el proceso musical con otras habilidades aprendidas a lo largo de la vida.
PRÃXIMOS ACORDES EN LA CARRERA DE CHEMA
Mirando hacia el futuro, Chema anticipa emocionantes proyectos. Desde la creación de eventos como "Primavera Musical" hasta la continuación de tradiciones como "Navidad ArtÃstica", su compromiso con sus alumnos y su comunidad es evidente. Aspira a tocar nuevas puertas y extender su influencia musical a la Huasteca sur, donde sueña con establecer otra escuela y crear una comunidad artÃstica y musical que ofrezca confort y desarrollo integral.
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