Semana del 28 de Noviembre al 04 de Diciembre de 2025

El camino al cielo

El camino al cielo

Héctor de Luna Espinosa

La tecnología ha avanzado a pasos agigantados. Seguramente has tenido la oportunidad de utilizar aplicaciones disponibles para los teléfonos inteligentes que te dirigen a encontrar una dirección mediante la navegación utilizando GPS, es decir, un sistema de posicionamiento global. Aplicaciones como Waze o Google Maps nos muestran instrucciones sobre cómo llegar; incluso utilizan información del tráfico en tiempo real para encontrar la mejor ruta que te lleve a tu destino. Y si te pasas porque no diste la vuelta donde debías, vuelve a redireccionarte, dándote una segunda opción; es decir, te da una nueva ruta para poder llegar.

La expresión "todos los caminos llevan a Roma" significa que hay muchas maneras diferentes de lograr el mismo objetivo o resultado. El dicho proviene de la época del Imperio romano, cuando su extensa red de calzadas construidas para conectar el imperio hacía que todos los caminos principales de alguna manera convergieran en la capital. Su origen histórico se basa en la vasta red de calzadas romanas; la capital era el centro del mundo para ellos y las carreteras estaban diseñadas para comunicar Roma con sus provincias. Y tiene un significado metafórico porque hoy en día se utiliza para expresar que un objetivo final puede ser alcanzado a través de diversas rutas, métodos o decisiones.

Sin embargo, para llegar al cielo encontramos un solo camino: Jesús. No hay otra opción. En una ocasión Tomás le preguntó a Jesús: "Señor, ¿cómo pues podemos saber el camino?" Jesús le dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí". Juan 14 versículo 6, que acabo de leer, es uno de los pasajes más básicos e importantes de las Escrituras.

¿Cómo conoceremos el camino hacia Dios? Únicamente a través de Jesús. Él es el camino. Noten que no dice que es uno de los caminos, sino el camino, ya que no hay otro más. No hay otra ruta. Si te sales de ese camino perderás tu destino. No habrá manera de redireccionarte. Jamás podrás llegar al Padre por ser el camino. Jesús es nuestra senda al Padre.

Jesús no solo revela el camino, sino que él es el único camino por el cual entramos en la comunión con Dios. Jesús dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida". Sin el camino no hay por dónde ir; sin la verdad no hay conocimiento; sin la vida no hay vivir. Jesús dijo: "Yo soy el camino que ustedes deben de seguir, la verdad que deben de creer, la vida que deben anhelar". A veces los hombres tratan de trazar sus propios caminos, pero solo los lleva a la perdición. Si quieres llegar al cielo debes seguir a Jesús, el único camino al Padre.

Te invito a acompañarme a orar: Señor, entiendo que no hay atajos para llegar al cielo, no hay otras maneras, no existen más rutas. La única manera de alcanzar el cielo es siguiendo el único camino, siguiéndote a ti. Te entrego mi vida, me rindo a ti Jesús, sé mi Señor, mi guía. Pongo mi vida en tus manos para que me dirijas y me lleves al Padre celestial. Amén.