Semana del 29 de Diciembre al 04 de Enero de 2018

2018: Un año de muchas incógnitas para San Luis Potosí

2018: Un año de muchas incógnitas para San Luis Potosí

Otro año finaliza, pero con él empieza una nueva etapa, donde se cierra un ciclo que fue difícil en los distintos ámbitos que enmarcan a nuestra sociedad mexicana, a nuestro estado potosino, como lo son lo social, lo económico, lo religioso, lo espectacular, lo deportivo, lo cultural, lo natural, lo científico, en fin, pero más sobresaliente, en lo político. Todo ello ha sido implícito en la vida de las familias, en el día a día, se ha visto que han pasado a formar parte de esta estampa existencial la cual no ha sido fácil para muchos, pero que se ha buscado la manera de sobrellevar todo ese cúmulo de situaciones, de problemas, de tragedias, de motivaciones y tantas y tantas circunstancias que han marcado este 2017 como uno de los más estridentes.

2017 cierra como la antesala electoral, fue el remanente del año que llega con olas de transformación, de cambios que harán la diferencia, de rumbos ignotos, pues aunque muchos se vieron sacudidos desde el gasolinazo que abrió la puerta de este año, y después las acciones que llevaron a cabo los ciudadanos en contra de todos los demás aumentos.

No hay que olvidar que la ola de violencia y corrupción también sacudió fuertemente a todo el país, y con ello a nuestro estado, a nuestra región, esa línea de gobernadores corruptos, de alcaldes asesinados, de manifestaciones, sean magisteriales, por sueldos paupérrimos, por injusticias, por feminicidios, por crímenes de periodistas, por desvíos de recursos, por fraudes millonarios, por abuso del poder, en fin, todo eso que afecta directamente a las masas prevaleció en este año.

Desde el nivel federal, se ha tratado de engrandecer las acciones encaminadas al desarrollo de la zona centro, zona media, zona del altiplano y zona huasteca, de nuestro estado, el cual necesita mucho más, hicieron falta mucho más apoyos al campo, al sector ganadero, al empresarial, faltó mayor impulso a la cultura, al deporte, a las escuelas, a las necesidades prioritarias de las comunidades, los servicios públicos, la seguridad, la educación, las instituciones, a tantos espacios que carecen de lo básico, pero se hizo lo que se pudo tanto en lo estatal como en lo municipal, aunque el tiempo se haya venido encima.

Es importante destacar que las problemáticas que más prevalecieron en este año en las múltiples regiones, fueron la inseguridad, el desabasto de medicamentos y personal en hospitales y centros de salud, al igual que la falta de buenos y mejores empleos o los problemas en el sector educativo, y aunque hubo cambio en las dirigencias de seguridad y capacitaciones a sus elementos, gestiones en la Secretaría de Salud para mejorar la calidad en los centros hospitalarios, ferias de empleo en varias ciudades y zonas rurales, así como reuniones y pláticas para mejorar conflictos educativos, quedó mucho por hacer, San Luis Capital, Ciudad Valles, Soledad de Graciano Sánchez, Rioverde, Aquismón, Tamazunchale, Ébano y otras urbes siguen creciendo y necesitan de grandes proyectos y, obviamente, de grandes objetivos.

Asimismo, algunos municipios buscaron solucionar sus conflictos de tierras y asentamientos, hubo varias dependencias que se dieron a la tarea de arreglar escrituras y darle certeza jurídica a los más necesitados, hubo más acercamientos con las autoridades para mejorar conflictos con los sindicatos, con los líderes de movimientos, de confederaciones, de secretarías, de direcciones, de instituciones, buscando siempre entablar buena comunicación y sin llegar a las acciones irracionales.

2017 también fue el escenario de las intenciones políticas de muchos y muchas ciudadanas que se destaparon con marcada anticipación para demostrar que tenían correa suficiente en sus zapatos y decirle a la población que tuviera esperanza, que tuviera fe, que confíe otra vez, que escuche las nuevas propuestas, las decisiones de candidatos jóvenes que llegan con otra visión, candidatos que están conscientes de la época que les tocó vivir, donde hay que llegarle a los jóvenes a través de las redes sociales, donde hay que involucrar a las mujeres que están más despiertas que hace 50 años, donde hay que ser imparciales con las comunidades de género, religiosas, civiles, con las asociaciones que luchan por la paz, contra la violencia, contra la corrupción, contra la pobreza, donde hay que buscar el apoyo de sectores empresariales, mineros, petroleros, de salud, comerciales, con los sindicatos y los pequeños comerciantes.

Fue un año de altibajos, de enfermedades, de tragedias, pero también de alegrías y fiestas, y la Huasteca Potosina se pintó de colores y cempasúchil, cuando llegaron los huehues a danzar sobre las tumbas en el Xantolo, a gritar ¡Viva México! frente a las presidencias municipales, a contemplar sus desfiles de Catrinas y diablos golpeadores, de revolucionarios, navideños, las antorchas guadalupanas por las carreteras del sur, las calles con series de luces que anunciaban la Nochebuena, los mercados repletos de flores, de velas, de regalos, de gastronomía diversa y toda clase de artículos navideños para adornar los hogares, así llegamos al cierre de este año.

Un año más que se va. Un año que refleja que San Luis Potosí, y sobre todo aquellas ciudades que crecen sigilosamente, no están gobernados sólo por funcionarios elegidos por las masas, sino por toda esa aldea global que lo sincretiza y lo va convirtiendo en un estado de opinión, de observancia, un estado que ha despertado, que sabe que el 2018 traerá nuevas sorpresas, que vaticina situaciones distintas, pero que está consciente de que puede afrontarlas siempre y cuando le den el lugar que le corresponde.