Semana del 01 de Febrero al 07 de Marzo de 2019

Cri Cri recuerda la más pura infancia de la gente

Cri Cri recuerda la más pura infancia de la gente

Jorge Espinoza

“Francisco Gabilondo Soler es un autor interesante dentro de la lírica mexicana del Siglo XX, dentro de la música popular, porque independientemente de la gran diversidad de géneros que tenemos en este país y todos los caminos musicales que se han generado, Cri Cri es como el gran introductor a la música popular y a la narrativa a través de lo que él definía más bien como cuentos musicalizados o canciones contadas”, así describe Tiburcio Gabilondo Gallegos a su padre, el creador de Cri Cri, el grillo cantor y toda una serie de personajes.

Consideró que sus creaciones son un filtro muy curioso que han pasado todos prácticamente, pues habrá temas que gusten más o que gusten menos, pero todo mundo puede reconocer un tema de Cri Cri y puede tener uno o varios como una referencia de las experiencias vividas de chicos.

“A la mejor cuando te ibas en bicicleta a la tienda, cuando venían de visitas los tíos o cuando te encontrabas con tus primos en verano, cuando ibas a la escuela en la mañana, cuando tenías que lavarte los dientes en la tardes, en fin, siempre vienen muy asociadas a todas esas vivencias que tuvimos de chicos, y eso lo bonito es que te permite tener varias generaciones enlazadas a través de todas esas experiencias que todos hemos vivido”, expresó.

Desde su perspectiva, es un gran cronista musical, que además enlaza con muchos temas que son totalmente coherentes, pues habla de emociones que se tienen desde chicos, que es cuando te da gusto ir a la escuela, te sientes un poquito triste, desapegado, pero hay amigos que te consuelan, como “La muñeca fea”, cuando hay algún chico travieso que se mete en problemas, como “El ratón vaquero”, o cuando hay una mamá que se esfuerza por sus hijos, como el caso de “La patita”, que todas son cosas de la vida cotidiana de los años 30’s hasta esta fecha, cuando Cri Cri está por cumplir 85 años de existencia.

Dijo coincidir con la percepción de que la suya era una pedagogía musical, una lírica que llevaba al ser humano a despertar la ilusión y la bondad, porque “lo que hacía Cri Cri era permitir que hubiese una coherencia, pero además fíjate qué es lo bonito, no te engañaba para contarte una historia, porque hay historias que son muy bonitas, pero a veces se despegan de la parte real o caen demasiado en la fantasía, que en realidad las historias deben ser siempre metáforas de la vida cotidiana o de los tiempos que se viven”.

Reiteró que Cri Cri habla de esas cosas que a veces dan gusto, dan tristeza, de amistad, poquito de desamor, recordando al “rey de chocolate”, que está enamorado de la “princesa caramelo”, que no lo quiere, pero al final hay un buen final, feliz, que no es exagerado, entonces son personajes que continúan con su vida bien, como lo hacen todos, y ahí está lo bonito, que es coherente en lo que te cuenta, con lo que acaba siendo la vida misma.

Respecto a la película de la vida de Cri Cri, con la actuación de Ignacio López Tarso y Marga López haciéndola de Chacha, comentó “les voy a confesar una cuestión sobre la película, biográficamente no es muy acertada, pero saben que sí es muy acertado, o está bien trabajado, justamente el papel López Tarso, quien convivió un tiempo con Francisco Gabilondo para tratar de conocer sus modos, la manera en que se expresaba y de tratarlo muy bien, y entonces la historia tiene varios patinones, que si hablamos de biografía, bueno pues no debemos tomarla tan en serio, pero lo que sí está muy retratado, es ese carácter dulce, amable, de Francisco Gabilondo, es el que está perfectamente manejado por el maestro López Tarso”.

Respecto a la comparación que se hace de Francisco Gabilondo Soler con Walt Disney, pues se dice que éste último se inspiró para sus personajes en mucho de la obra de su padre, consideró “es muy bonito cuando hacen la comparación, pero yo creo que a veces tenemos que ponerlo un poco en la dimensión, Disney como dibujante era mediano, la verdad es que se pulió con el trabajo de otros dibujantes y él lo reconocía, su gran talento fue ser un gran director y productor, y saber a qué quería llegar, pero el gran hombre de negocios era su hermano Roy Disney, y la gran prueba de que Disney era un artista fue que hizo quebrar su empresa dos veces”.

“En el caso del trabajo de Cri Cri, en realidad estamos hablando del trabajo de un solo hombre, porque él escribía la letra, la música, hacía los arreglos, interpretaba las canciones, escribía los cuentos, la literatura, inventó el personaje, y a veces le tocaba llegar temprano al programa en Ayuntamiento 52, en la mítica XEW, entonces en proporción también logró crear un universo enorme y muy rico, y además para fortuna de nosotros, porque es de México y es muy original, eso sí”, destacó.

Sobre la percepción de que la obra de su padre rememora la inocencia del México de entonces, señaló “no sé si inocente sea la palabra correcta, porque me lo han planteado mucho, pero yo creo que sí hablamos de un México muy limpio, y además hay una cosa que es muy bonita alrededor de esto, cuando hablamos de Cri Cri pasamos de las cosas de ser niño a ser adulto, y normalmente cuando eres adulto, tratas de comportarte como adulto, pero cuando sale el tema de Cri Cri nadie tiene empacho en decir oye sí a mí me gustaba tal canción, entonces en ese momento vuelves a ser niño de un modo muy limpio, sin problema, sin enfado, sin vergüenza, sin reservas, es como esa parte bonita de la infancia, y eso lo permite Cri Cri, llega a ti, se queda adentro, florece y después limpiamente sale otra vez”.

Se ha llegado a considerar a Cri Cri como un pedagogo de la cultura popular mexicana, porque transmitía ese amor a las instituciones y normas morales, y al respecto mencionó “pues fíjate que sí, una gran pedagogía popular, pero sin proponérselo, porque Cri Cri nunca dijo yo voy a educar con esto, él decía yo voy a entretener, pero es un entretenimiento tan bien cuidado, tan bien hecho, tan honesto, tan convencido y tan comprometido con su trabajo, que en realidad sirve justamente para apoyar la enseñanza, y aunque no se lo haya propuesto, qué bueno que haya sido así”.

Tiburcio Gabilondo Gallegos asistió al Festival de Lectura y Feria del Libro en Ciudad Valles, para presentar “La patita”, el primer libro de la serie denominada “Aventuras de Cri Cri, el grillito cantor”, en el que participa como director de arte Alejandro Zárate Orozco. Se trata de un proyecto que quedó pendiente en 1961, tras el último año del programa de radio, y que tenía como propósito contar la historia de sus personajes, en historietas, pero en aquel entonces sólo se hicieron unos cuantos ejemplares, y ahora lo retoman, pero en libros.

Cuando yo era muy chico, como tres años o dos, (a mi papá) le gustaba hacerme una broma, cuando estaba a punto de dormirme llegaba y me tocaba el violín, y ya que me estaba durmiendo, me tocaba el jarabe tapatío, para despertarme, él era un súper bromista, y entonces esa parte era súper divertida, porque para mí no era Cri Cri, era mi papá, y era un señor súper divertido”.
Tiburcio Gabilondo Gallegos.
Hijo de Francisco Gabilondo Soler


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