El sector cañero en la huasteca, la atractiva industria para sembrar terror

El sector cañero en la huasteca, la atractiva industria para sembrar terror

- La Industria Cañera en la región Huasteca, se ve asolada por delitos de extorsiones, lo que se acrecienta ante la falta de denuncias, ya que la autoridad se mantiene omisa a los hechos ya palpables.

Redacción| Emsavalles| San Luis Potosí, S.L.P.| Viernes, 30 de Diciembre de 2022| 16:58

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El sector cañero en la Huasteca Potosina, ha significado por décadas una mina de oro, por lo que el desarrollo económico en la región, ha sido en gran parte por la siembra, producción y procesamiento y por ende, la manera en la que miles de familias han visto su manera de salir adelante, pues el negocio es redituable.

Lamentablemente, tan redituable ha sido, que bandas delictivas se han infiltrado para cobrar cuotas por toneladas, apoderándose y utilizando los sindicatos, por que es así, como de manera "oficial", operan sin que nadie haga ni diga nada, pues denuncias no existen, ya que los productores han sido amenazados con ser levantados -hechos que ya hay algunos casos-, secuestrados, golpeados o incluso, desaparecidos.

Lo anterior debido a que a pesar de que los productores han confiado esta situación a las autoridades, estas aseguran que no hay pruebas contundentes, por lo que el miedo a oficializar una denuncia ante las instancias correspondientes, es la merma más grande que se tiene, así que si no hay denuncia, no hay delito... pero nada más fuera de la realidad, la situación es grave.

La infiltración de personajes relacionados con la mafia cañera, ha tenido acceso a cifras contundentes en todos los ingenios ubicados en SLP, tan solo en el periodo del 15 de diciembre del 2021 al 8 de mayo del 2022, se produjo un millón 200 mil toneladas de caña, lo que se tradujo en 126 mil toneladas de azúcar, con un rendimiento del 10.5 por ciento.

Esta industria genera al menos 5 mil empleos y otros tantos indirectos, y el estimado de personas ligadas a la producción cañera, es de 12 mil familias que penden de este trabajo; gran parte de estos empleados, son de confianza y sindicalizados, ejerciendo una ganancia sobre el seguro social de un aproximado de 6 millones de pesos.

Sin embargo, el miedo ha ido más allá, poco a poco comienzan a vender sus tierras con siembra, e inclusive en los acuerdos de ventas, va el convenio con el ingenio sobre el destino final de la producción.

Esto, a raíz de las cuotas impuestas por los "delincuentes de cuello blanco", como lo describiría el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, pues como se mencionó, son los infiltrados en los sindicatos, los encargados principales de ejercer presión entre los productores para que cedan a "su negocio", por ello las situaciones en las que han llegado incluso a los golpes por presidir las mesas directivas de los sindicatos.

Aunado a lo anterior, la construcción de la carretera Valles-Tamazunchale, es otro factor apremiante para las ya de por sí víctimas de sus propios representantes, siendo de esta manera en que las amenazas constantes, ya son permanentes, con lo que las zafras ya son consideradas temporadas de terror.

Antes de los cambios de gobierno se pudo detener a algunos generadores de violencia, pero hoy bajo el pretexto que no hay denuncias no se actúa, lo que da la pauta a las autoridades de hacerse de la vista gorda e insistir "si no hay denuncia, no hay delito", situación similar a la que viven productores de aguacate en Michoacán y que hoy por hoy padecen cañeros en San Luis Potosí.