Semana del 21 de Marzo al 27 de Marzo de 2024

Después de AMLO, la Monarquía Guinda en San Luis

Después de AMLO, la Monarquía Guinda en San Luis

Leonel Serrato Sánchez

No hay oposición, ni crítica interna.

Llevar a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la República fue una hazaña del Pueblo de México, que tuvo muchos factores, entre ellos, los principales, que pueden explicar el éxito, la persistencia ética del dirigente, y la meta fija en el empoderamiento de los más pobres que el Pueblo asumió como una lucha personal y directa en contra de la corrupción del régimen.

La terquedad de AMLO no requiere explicación, aunque para muchos resulta incomprensible el que no era una pretensión personal, sino que él vio con claridad que lo que ha impedido la grandeza de México era el caudillismo; sin embargo no tiene misterio, él es un estudioso de la historia.

Habiendo vivido la experiencia destructiva que significaron las llamadas "tribus" para el Partido de la Revolución Democrática PRD, fundado por el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano; creyó AMLO imprescindible que naciera un partido político diferente, que evitara las corrientes, los proyectos personales, los clanes, las familias, y lo que las mantiene: las prebendas y pagos por lealtad o apoyo, así concibió MORENA.

En la idea, el de AMLO MORENA era un partido que pudiera "llenarse" de Pueblo cuando eso fuera necesario, y que permaneciera "inerte" cuando ejerciera el poder desde el gobierno; AMLO diseñó un mero instrumento para acceder al poder en el marco legal, y no una "falange", mucho menos un reservorio de personas haciendo fila para que llegado el momento les "tocara" ejercer el poder, basta revisar los documentos básicos originales para darlo por sentado.

Pero desde muy pronto se dio cuenta que la política corporativa habría de apoderarse de MORENA, e incapaz, por ser un demócrata, de entremeterse en la vida partidista, determinó cortarle las vías tradicionales de manutención usadas por las "tribus", prohibiendo hasta la obsesión que quienes participaban del gobierno se metieran en los asuntos del partido, y proclamando una austeridad franciscana para los servidores públicos a su mando; con ambas medidas pretendió que fuera no rentable ser parte del gobierno, y resultar inútil estar en el partido para formar grupos; pero fueron muchos años de conservadurismo, durante ese largo periodo la generación de AMLO estaba perdida, y las siguientes generaciones dominadas por la ignorancia, la afección por lo material, el miedo y el egoísmo; así, lo inevitable sucedió.

Los ambiciosos de siempre, y los aspiracionistas, para obtener éxito, fama, poder, el placer del materialismo, y la reivindicación de sus miedos, y viendo que estaban prohibidos por la moral obradorista, las corrientes, los proyectos personales y, desde luego, las "tribus", acudieron a dos instrumentos, los nexos familiares, el linaje, y la teoría de género.

Al terminar la era de AMLO, y observando lo difícil de la transformación sin violencia, la "clase política" optó por refugiarse en la infalibilidad del linaje, y la incontestable lucha de la equidad entre géneros; ¿Quién podría objetar que cónyuges, hijas e hijos, hermanas, hermanos, parejas, o segmentos sociales históricamente discriminados llegaran al poder?

Esa es la razón por la que, en lugar de respetar la elección de la mayoría, como prescribió AMLO, se implementara el linaje como mérito, el género como justificación, o ambos.

Después del gobierno de AMLO, termina la lucha por la transformación de la vida pública nacional nacida de su pensamiento, e inicia un sucedáneo, una emulación, un engaño; urgidos, los ambiciosos y aspiracionistas encuentran una forma de garantizar su éxito: es usando el linaje, después de todo la sangre no se equivoca, hijo de tigre, pintito, de tal palo, tal astilla, lo bueno se mama, más vale malo por conocido que bueno por conocer, y si es mujer, mejor, porque atacar a una heredera, a una hermana, a una sobrina, a una esposa, a una hija, es misoginia ¿Pude alguien oponerse a ello sin ser hecho pedazos por la reinante ideología de género.

¿Quién determinó que alguien fuera hija, hermana, sobrina, esposa o pareja de otra persona si no Dios?, ¿No resulta entonces, totalmente natural y válido, que sea esta forma moderna de monarquía hereditaria la que sustituya al Elegido?

Dispute a Dios la falta de linaje, porque sólo a Él corresponde decir si se nace en tal y cual familia o sin ella. Clame a Dios si se nace mujer, u hombre, finalmente Él decide esa cuestión.

Si se tiene audacia, burle a Dios, cásese con la familia que corresponde, o cambie su género.

De esa manera queda explicada la razón por la que MORENA optó por postular, en San Luis Potosí, a Rita Ozalia, la hermana de la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de AMLO, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, y como su suplente a Enidia del Carmen Duque Rodríguez, la sobrina de la propia funcionaria, casada (cómo no) con el diputado federal de Morena y Verde, Kevin Ángelo Aguilar Piña.

Igualmente, por esa razón, MORENA postula a Jessica Gabriela Torres López, esposa del Delegado de los Programas de Bienestar en San Luis Potosí, Guillermo Morales López, o a Luis Emilio Rosas Montiel, hijo del tamaulipeco priista Salomón Rosas, coordinador de campaña de Marcelo Ebrard.

En los aliados de MORENA, también es el linaje el que llevó a Ruth González, esposa del Gobernador a ser candidata al Senado por el Verde, a Ricardo Gallardo Juárez, padre del mismo Gobernador a candidato a diputado plurinominal federal.

¿Para que postular plebeyos? ¿Sólo porque la gente los quiere?

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