Semana del 14 de Julio al 20 de Julio de 2017

Medicina emocional la alternativa para vivir mejor

Medicina emocional la alternativa para vivir mejor

Abordará la terapia de regeneración celular a través de la médula espinal
Alivia enfermedades derivadas del estrés, la presión, la angustia y el miedo.

René Mey es un francés, hombre de paz, sin ninguna afiliación política o religiosa, y dedicado a la labor humanitaria y a transmitir un mensaje de esperanza para formar un nuevo camino de ayuda a los demás, de ayudarnos los unos a los otros.

Despertó sus sentidos y comprendió que la razón de nuestra presencia en la vida reside en dar; por lo que durante muchos años recibió y atendió a miles de personas para ayudarlas en cualquier tipo de problemas: afectivos, enfermedades, espirituales, profesionales, así mismo, visitó a enfermos hospitalizados, sobre todo aquellos que estaban bajo cuidados oncológicos o en fase terminal.

De esta manera lo describe la representante de la Fundación Mexicana René Mey A.C., Agripina Mendoza, quien recuerda que ésta se funda en septiembre del 2007 por René Mey y Juliette Laure, con el primer Centro Humanitario en Taxco, Guerrero, seguido de Morelia Michoacán y hoy en día con más de 360 y 3 clínicas ubicadas en Querétaro, San Miguel y Cuitzeo, donde se imparte de manera gratuita terapias de medicina emocional.

Agripina Mendoza explica que René Mey ha desarrollado esta técnica de medicina emocional, porque hoy en día la mayor parte de los padecimientos que se tienen son de tipo emocional, de estrés, presión, angustia, miedo, y todo eso nos va generando enfermedades psíquicas.

Es por eso que él en esta búsqueda de cómo poder ayudar a los demás, se dedica cada fin de semana a ir a una comunidad a diferentes países a dar un mensaje de paz y esperanza, que a través del amor es como podernos ayudarnos, y entonces desarrolló esta técnica de la medicina emocional.

Precisamente ésta se va a dar a conocer en Ciudad Valles, y señala que básicamente se compartirá de manera gratuita la terapia de regeneración celular, la cual consiste en estimular la médula espinal, con unos toques pequeños que se hacen a través de la columna vertebral, que van despertando las células, esas membranas que están ahí dormidas, “y reconocen este amor que todos los seres humanos tenemos, se reconecta este terapeuta con la persona que recibe la terapia, y entonces es como despiertan estas células emocionales y empiezan a sentir primeramente una relajación, tranquilidad, y conforme van siguiendo la terapia, se empiezan a regenerar las células y a ir recuperando la salud”.

Comenta que, dentro de la filosofía de la fundación, se les ha enseñado a no juzgar, a no criticar, a aceptar a las personas como son y de esta manejar las van a quitar de estar sufriendo por el estar suponiendo lo que pudo pensar o lo que pudo suceder, “de esta manera vivimos más tranquilos, sin estar preocupados sino estar ocupados en cómo podemos ayudar más”.

“Todos estamos conectados, no somos individuales, todas las personas, todos los seres humanos estamos conectados, por eso es que debemos ocuparnos los unos de los otros, de esta manera es como empiezan a bajar estos grados de angustia, de ansiedad, cuando vamos a lugares que le llamamos centros humanitarios, como son las cárceles, los hospitales, los albergues, casas hogar, asilos, al dar esta terapia tú te das cuenta tan sólo en el instante sienten una tranquilidad, se sienten más relajados, a la siguiente semana te dicen ‘me sentí mejor, ya desapareció tal molestia’”, expresa.

Y recuerda que en Valles tuvieron una experiencia con bomberos, empezaron a ir, pero después ya no querían recibir la terapia, no porque no les gustara, sino porque es tanta la relación que sienten, que lo que querían era tener una cama en el momento para descansar y ellos lo que necesitan es estar alerta cuando les llega una llamada de auxilio; “es muy interesante, esta terapia es muy sencilla, no dura más allá de 5 minutos, pero es muy profunda, porque llega a la parte emocional de la célula”, agrega.

Y aunque reconoce que es algo muy sencillo, siempre es difícil para las personas que están inmersas en esta sociedad de tanto materialismo, de estar estresado por el trabajo, “entonces nosotros los voluntarios nos tomamos una hora de nuestro tiempo para ir a regalar, para ir a estos lugares y poder ayudar a estas personas, pero también decirles que ellas pueden hacer lo mismo y que nosotros los instructores podemos enseñarles de manera gratuita”.

“Es la idea de llegar a Ciudad Valles y a más personas, no importa dónde estén o a lo que se dediquen, como les digo a mis amigos, dejamos los títulos a un lado en nuestras casas, todos somos personas, seres humanos, que requerimos de alimentarnos, de divertirnos, pero también el buscar esta manera de cómo poder ayudar a los demás, y esto es más que nada invertir un poquito de nuestro tiempo, porque no es dinero lo que vamos a invertir, a la mejor sí el trasladarnos en el camión, en el autobús para llegar a algunos lugares, pero se hace con mucho gusto de ver la satisfacción de cómo va mejorando tu salud emocional y también en la salud física”, afirma.

Finalmente, en el caso de Ciudad Valles, señala que se va a impartir un taller que dura aproximadamente cuatro horas y que si gustan pueden compartir otros dos de manera gratuita, que son voluntarios de la conciencia, o sea los actos de buenas acciones que hacemos y que ayuda para tener una mejor sociedad, y el estado de conciencia, que también es muy importante alimentarla de una manera correcta y sana.

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