Todo este asunto de Evo Morales llama tanto a la reflexión por las cosas que se dicen o se inventan, con tal de defenestrar una decisión del estado mexicano.

Fue una decisión correcta y está apegada a una tradición casi centenaria de México de dar Asilo. Lo increíble es que muchos de los que hoy hacen gala del mayor arte de denostación, ultra-conservadurismo, memeo y engaño son descendientes directos de aquellas cerca de 80 mil visas que se dieron en Europa para dar a asilo a extranjeros en época de Lázaro Cárdenas.

¿Sabían que los connotados ideólogos panistas González Luna y Gómez Morín se oponían férreamente a recibir exiliados españoles republicanos?, pregunta seria pues, y la respuesta es positiva.

Hoy vemos al feroz presidente del PAN en la misma actitud y da vergüenza porque México ha estado asilando a venezolanos todos estos años a raíz del nefasto chavismo.

Un simple personaje como Evo les ha hecho sacar a relucir su más nefasto conservadurismo rayado en despotismo, su extrema intolerancia al indio, al jodido.

Los excesos fundamentalistas son malos, siempre lo he dicho.

No soy internacionalista, soy terrícola, aunque no se necesita serlo porque se ven cosas muy claras en el fondo y no en la forma de todo este rollo:

1. Evo no es Maduro, como muchos quisieran que fuera, ése infumable personaje venezolano sí que es un dictador y asesino. No es el caso.

2. El tipo comete un error (claro indefendible) de modificar la constitución para asumir un cuarto mandato. Las elecciones tampoco juegan mucho a su favor, pero no mamen ahora resulta que es el mayor aprendiz mapachero priista.

3. Bolivia ha mantenido un crecimiento anual sostenido cercano al 5% en los últimos 10 años, algo que ni los 6 de Calderón, los 6 de Peña y 1 de López Obrador lograron. Pasó de 9.5 mmdd de PIB en 2005 a 40 mmdd en 2018. Sí, hay avances en salud y pobreza.

4. Nacionalizó los hidrocarburos y obvio esto le dio en la madre a los intereses de EUA.

5. El _Impechmentado_ Trump no solo persigue el gas de Bolivia, persigue el litio, del que es rico el país y necesarísimo para la tecnología (tenemos en nuestros celulares por ejemplo).

6. Por eso Trump operó el escenario para derrocarlo, la “sugerencia” con la pistola en las costillas del Jefe de la Policía, por supuesto que es un puto golpe de estado. No chinguen más claro no puede ser.

7. La OEA es una suerte de sucursal del pentágono y da una vergüenza enorme el sometimiento que tiene a la estupidez. Solo ha servido para echar leña al fuego.

8. Mejor la posición del Secretario de la ONU Gutérres fue plausible y conciliadora: llamar a elecciones para que el pueblo decida qué pedo con su vida.

9. Es inverosímil, inaudito y una tragedia que la impuesta nueva presidenta Jeanine Añez asuma la presidencia de Bolivia con una biblia en la mano y la ostia en la boca. Decimonónicamente satánico diría yo.

10. Hay un conservadurismo totalitario abanderado por Trump, Bolsonaro y los ricos de Santa Cruz que están detrás de esta nueva lucha de clases en el hemisferio sur.

11. Al final es una lucha clasista de poderes: los ricos contra los pobres.

Evo tiene cara de indígena y es indígena, ha dado un poco de dignidad a su sector milenariamente golpeado y cómo va a ser eso para los blanquitos con platita.

12. Le inventaron una foto con el zar de las drogas Escobar y El Chapo Guzmán, haciéndolo parecer de la misma especie. Qué mamada.

13. Le inventaron una suite de jeque árabe y las imágenes reales de su casa muestran una casa pues muy modestita la neta.

América del Sur es un hervidero de ideologías mega encontradas.

Chile en contra el neoliberalismo. Se les cayó a los neoliberales mexicanos el sueño chileno y ni pío dicen.

Argentina en contra del neoliberalismo.

Brasil en contra del pueblo y la social democracia. Pero ahí viene Lula.

Todos metidos en corrupción.

Claro está que México, de alguna forma, está sintiendo un jalón del conservadurismo extremo. No les conviene un tipo que se acerca al pueblo y pone en riesgo sus negocios, la cultura de la corrupción que han sembrado con honor y el abuso del poder en su más alto nivel.

Aunque México creo, debe verse en el espejo del sur.

Es cuanto.